Queridos amigos, como os prometí, le dedicamos un día al Copón, ese gran término, propio de diversas regiones, entre ellas el Aljarafe alto.
Copón divino (para mayores), copito o copero (versión infantil), tantas y tantas variables del término que hacen las delicias de los lugareños para expresar sus más profundos sentimientos.
Simple o adornado (¡me cago en el copón!), el copón encierra un significado de plenitud (oral y expresiva) indescriptible.
Casa con cualquier expresión: ¡Copón, qué frío hace!, ¡Qué buna estás, copón!, etc.
Sobre su ubicación, podemos colocarlo delante (¡Copón!, dónde vas?), detrás (¿Dónde vas?, ¡copón!) o en medio (¿¡Pero qué copón estás hablando!?)
Es un término polisémico, ¡te voy a dar un copón que pa qué...! (¡te voy a dar un tortazo que para qué!), la casa está en el copón (la casa está muy lejos), ¡un copón pa tí! (una mierda pa tí), ¡que caliente estoy, copón! (¡que excitado estoy, Dios mío!)
Puede denotar alegría o pena, según el contexto; ¡qué mala suerte tengo, copón!, Vente de juerga, ¡copón!, y te animas.
Como persona de letras que soy, me veo obligada a traeros además la definición, no más exacta, que la RAE hace del término:
copón:
1. m. Rel. En el culto católico, vaso sagrado en forma de copa grande, que contiene las hostias consagradas.
del ~. 1. loc. adj. vulg. malson. Muy grande, tremendo.
el ~. 1. loc. adv. vulg. malson. El colmo.
Y hasta aquí, nuestro día dedicado al copón.
lunes, 10 de diciembre de 2007
viernes, 7 de diciembre de 2007
nuevos conceptos
Tenemos nuevos conceptos del amigo Jota para reflexionar:
VIAJERO: Dícese del autobús de to la vida de dió.
AUTOBUSERO: Dícese del conductor del viajero.
TERRUÑERO: No se, no contesto.
Tenemos que dedicarle un día al COPÓN, norma y uso.
VIAJERO: Dícese del autobús de to la vida de dió.
AUTOBUSERO: Dícese del conductor del viajero.
TERRUÑERO: No se, no contesto.
Tenemos que dedicarle un día al COPÓN, norma y uso.
Ciudao que pa qué...
¡Cuidao que pa qué...!
Supuestamente, la jenny, conocido mariquita del lugar del que sale la expresión, le compraba regularmente a la ditera del pueblo, que si calzoncillos, camisetas interiores, pantalones, camisas, ropa más chunga para el trabajo... de todo.
Se llevó sin pagarle a la mujer mucho tiempo. Ésta se lo encontró un día en un comercio al que ella compraba para abastecer a sus clientes (los diteros compraban en almacenes o tiendas y lo vendían a la gente de la calle a plazos, por eso la gente les compraba a ellos) y le dijo:
Ditera: -Hombre, Jenny, que de tiempo, ¿no pensabas pasarte por mi casa nunca?
Jenny: - ¿pa qué?
Ditera: - ¡Cuidao que pa qué...!
Es la primera expresión que os traigo, pa que la comenteis y añadais nuevas expresiones.
Supuestamente, la jenny, conocido mariquita del lugar del que sale la expresión, le compraba regularmente a la ditera del pueblo, que si calzoncillos, camisetas interiores, pantalones, camisas, ropa más chunga para el trabajo... de todo.
Se llevó sin pagarle a la mujer mucho tiempo. Ésta se lo encontró un día en un comercio al que ella compraba para abastecer a sus clientes (los diteros compraban en almacenes o tiendas y lo vendían a la gente de la calle a plazos, por eso la gente les compraba a ellos) y le dijo:
Ditera: -Hombre, Jenny, que de tiempo, ¿no pensabas pasarte por mi casa nunca?
Jenny: - ¿pa qué?
Ditera: - ¡Cuidao que pa qué...!
Es la primera expresión que os traigo, pa que la comenteis y añadais nuevas expresiones.
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